Castración de nuestras mascotas: ¿Porqué hacerlo?

La castración o esterilización es una cirugía con defensores y detractores, pero desde nuestro punto de vista tiene muchas más ventajas que inconvenientes. Se trata de una cirugía sencilla y rutinaria con una rápida recuperación

Hembras:

En perras y gatas disminuimos la probabilidad de aparición de tumores de mama en edades avanzadas. También prevenimos la aparición de infecciones uterinas y de embarazos psicológicos.

Las gatas presentan en ocasiones celos muy seguidos y son frecuentes los tratamientos hormonales para inhibirlo. Con la cirugía evitamos todos estos tratamientos que tienen numerosos efectos secundarios y a largo plazo es más económico.

Machos:

En el caso de los machos prevenimos patologías prostáticas (quistes, tumores) así como tumores testiculares. Además la castración nos ayuda a controlar determinados comportamientos de agresividad y dominancia, y es un paso necesario en el tratamiento de muchos problemas de conducta.

En gatos machos evitamos el marcaje. Con la castración también les proporcionamos bienestar además de salud; ¡pensemos en lo mal que lo pasan los gatos y gatas caseros cuando están en celo!

El peor inconveniente está en que nuestras mascotas engordan pero eso lo podemos controlar con una buena alimentación y ejercicio.

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Gatos callejeros: La importancia de colonias felinas controladas

Para evitar la sobrepoblación, quejas vecinales y muertes de felinos por accidentes y enfermedades somos partidarios de la creación de colonias felinas donde los animales se esterilizan y se vuelven a soltar.